Construcción barroca que se sitúa junto a un dique de contención de aguas de época romana. Se trata de un edificio de nave única de cinco tramos rectangulares con pequeños altares a ambos lados, cubierta con bóveda de medio cañón con lunetos sobre arcos fajones rebajados, cuya cabecera se ve ampliada por la Capilla de la Virgen. La nave y la capilla forman dos zonas independientes, separadas por una reja de forja llevada a cabo en 1980.
Al exterior está construida en mampostería de piedra y ladrillo, presentado un aspecto compacto, monumentalizado por las dos torres, de planta cuadrada y tres cuerpos de altura, que flanquean la fachada occidental rematada por un frontón triangular, que es fruto de una reforma llevada a cabo en 1900. El cimborrio, de planta octogonal cuyos muros se articularon mediante la disposición de vanos de medio punto, cubre al exterior la cúpula de la capilla, estando recubierto por tejas de cerámica vidriada características de Muel, denominadas ¿lágrimas?. Se remata con una linterna de acusada verticalidad.
La ermita de Nuestra Señora de la Fuente es una obra barroca que cuenta con una decoración muy sencilla de influencia del barroco clasicista introducido por la Basílica del Pilar de Zaragoza; durante el último cuarto del siglo XIX se colocó la azulejería de Muel con motivos florales y de angelotes; pero lo más destacado son las pinturas murales que Francisco de Goya llevó a cabo en las pechinas de la cúpula que cubre la Capilla de la Virgen.
Conquistada la villa por Alfonso I tras la toma de Zaragoza, en 1118, la ermita de Virgen de la Fuente se levanta sobre los cimientos de la antigua mezquita musulmana que protegía el dique de contención de aguas de época romana.
Hay constancia documental de la veneración a la Virgen de la Fuente desde finales del siglo XIII. En 1766 la antigua ermita románica queda prácticamente destruida a causa de una inundación y será necesario la construcción de un nuevo edificio, concluido en 1770, construyendo la Capilla de la Virgen; es hacia esas fechas cuando Francisco de Goya pinta las pechinas de la capilla de la Virgen.
Durante la Guerra de la Independencia la ermita es muy dañada por lo que se procede a una restauración en 1816. En 1879 se añade la decoración de azulejería, y en 1900 se lleva a cabo la fachada actual.
Baroque construction that is located next to a water containment dam from Roman times. It is a single-nave building with five rectangular sections with small altars on both sides, covered with a half-barrel vault with lunettes on lowered transverse arches, whose head is enlarged by the Chapel of the Virgin. The nave and the chapel form two independent areas, separated by a wrought iron grille carried out in 1980.
On the outside it is built in stone and brick masonry, presenting a compact appearance, monumentalized by the two towers, square in plan and three bodies high, which flank the western façade topped by a triangular pediment, which is the result of a reform carried out in It was completed in 1900. The dome, with an octagonal floor plan whose walls were articulated by means of the arrangement of semicircular openings, covers the exterior of the dome of the chapel, being covered by glazed ceramic tiles characteristic of Muel, called tears?. It is finished with a lantern of marked verticality.
The hermitage of Nuestra Señora de la Fuente is a baroque work that has a very simple decoration influenced by the classicist baroque introduced by the Basilica del Pilar in Zaragoza; During the last quarter of the 19th century, Muel tiles were installed with floral and cherub motifs; but the most outstanding are the mural paintings that Francisco de Goya carried out on the pendentives of the dome that covers the Chapel of the Virgin.
Conquered by Alfonso I after the capture of Zaragoza in 1118, the hermitage of Virgen de la Fuente stands on the foundations of the old Muslim mosque that protected the Roman-era water containment dam.
There is documentary evidence of the veneration of the Virgen de la Fuente from the end of the 13th century. In 1766 the old Romanesque hermitage was practically destroyed due to a flood and it was necessary to build a new building, completed in 1770, building the Chapel of the Virgin; it is around those dates when Francisco de Goya paints the pendentives of the chapel of the Virgin.
During the War of Independence, the hermitage was badly damaged, which is why it underwent a restoration in 1816. In 1879, the tile decoration was added, and in 1900 the current façade was completed.
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